Cepillarse los dientes es parte de la rutina diaria para la mayoría de las personas. Sin embargo, la limpieza de la lengua no forma parte de este ritual matutino o nocturno para muchos.
La lengua a menudo es un caldo de cultivo para bacterias y cándidas.
En muchos países orientales, la limpieza de la lengua ha sido parte de la higiene bucal diaria durante miles de años como un ritual de limpieza ayurvédico.
Pero también en la cultura occidental, la limpieza de la lengua está ganando cada vez más popularidad. Se cree que la limpieza de la lengua mejora la higiene bucal.
Nuestra cavidad bucal está llena de bacterias, cándidas y otros microorganismos. Solo en los depósitos de las bolsas periodontales se han identificado 800 tipos diferentes.
Estos microorganismos tienden a establecerse en lugares donde el cepillo de servicio no puede alcanzar y donde hay poco oxígeno disponible.
Los lugares ideales son los espacios interdentales, las bolsas periodontales y las prótesis dentales.
Solo la lengua recientemente ha recibido atención en este aspecto. Las bacterias pueden acumularse fácilmente en la lengua y producir mal aliento debido a la producción de sulfuro.
El mal aliento es el vapor de azufre. Esto se hace con las bacterias y los cándidos del resto de alimentos y células de la lengua.
Por lo tanto, la causa más común del mal aliento son los depósitos en la lengua.
Los raspadores de lengua ayudan a eliminar estos depósitos y, por lo tanto, reducen el mal aliento.
¿Cómo sé si debo limpiar mi lengua?
Nuestro cuerpo está expuesto constantemente a toxinas presentes en nuestra alimentación, bebidas y el entorno.
Incluso nuestros propios desechos metabólicos y emociones pueden causar toxicidad.
Si las toxinas no se digieren y eliminan adecuadamente, se acumulan en el cuerpo y comienzan a afectar nuestro bienestar y nuestra inmunidad.
La acumulación de toxinas en el cuerpo también es posible detectar a través de señales en la cavidad bucal:
Limpiadores de lengua con eficacia comprobada
En India, usan raspadores de lengua antibacterianos de cobre o plata para la limpieza diaria de la lengua.
Actualmente, también se pueden encontrar raspadores de lengua y cepillos de lengua especiales en nuestro país.
En general, puedes usar otros utensilios, como el dorso de un cepillo de dietes o una cuchara, para la limpieza de la lengua.
Sin embargo, estos suelen ser más grandes o menos planos que un raspador de lengua y, por lo tanto, pueden provocar más fácilmente un reflejo nauseoso.
También se debe tener cuidado al usar una cuchara para asegurarse de que no tenga bordes afilados.
Uso correcto del raspador de lengua
El uso de un raspador de lengua es sencillo:
Coloca el raspador de lengua en la parte posterior de la lengua y llévalo hacia adelante. El tercio posterior de la lengua es el más afectado por los depósitos.
Repite el proceso varias veces hasta que el raspador de lengua no tenga residuos adheridos.
El raspador de lengua se puede sumergir en enjuague bucal para un efecto adicional.
La limpieza de la lengua debe integrarse como parte fundamental de la rutina de cepillado dental y, sobre todo, debe realizarse por la mañana al despertar antes del desayuno para evitar tragar bacterias y cándidas nuevamente.
Mal aliento: ¿qué se puede hacer?
Remedios caseros para la limpieza de la lengua
Además de usar un raspador de lengua, algunos remedios caseros pueden ayudar a limpiar la lengua.
Algunas variedades de té, como el té de salvia o el té negro, tienen propiedades desinfectantes. De manera similar, los enjuagues bucales antibacterias también tienen un efecto similar.
Masticar alimentos duros, como zanahorias o manzanas, también puede ayudar a eliminar los depósitos de la lengua.
En general, se recomienda beber mucha agua para enjuagar bien la boca y reducir la formación de depósitos en la lengua. Los chicles también son útiles, ya que estimulan la producción de saliva.
Conclusión: la limpieza de la lengua en general es beneficiosa
Actualmente, no se ha probado que la limpieza de la lengua reduzca la cantidad de bacterias en la boca.
Sin embargo, la limpieza de la lengua como parte de la higiene bucal diaria debería ayudar a eliminar los depósitos de manera más efectiva.
Esto significa que las bacterias en la boca tienen menos alimento y producen menos compuestos de azufre, lo que previene el mal aliento.
Los raspadores de lengua son una adición útil a la higiene bucal para prevenir o reducir el mal aliento.
Además, vea que la sensibilidad de los receptores del gusto en la lengua mejora con la limpieza.
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